Hay una variedad de desagües en una vivienda que deben mantenerse limpios para que funcionen correctamente y no produzcan mal olor.
Una razón muy común son las tuberías pequeñas o una estructura de desagüe con curvatura que no permite el drenaje adecuado y donde se va acumulando excesos de jabón, aceite y pelos que al descomponerse producen el mal olor.
Otra de las razones es un mal sellado de las juntas en bañeras y duchas que puede dar lugar a filtraciones de agua creando humedad y hongos dando lugar a mal olor.
Materia inorgánica se acumula produciendo bacterias en los desagües de baños
No siempre el mal olor está en un mal drenaje, en una ocasión se realizo una pequeña reforma en el baño de una casa que había estado deshabitada, cambiando la bañera por plato de ducha, el olor que se desprendía del desagüe, no era de materiales inorgánicos por un continuo uso, el mal olor se producía por el flujo de retorno del gas de la alcantarilla o fosa séptica que necesitó una reparación de alcantarillado por una obstrucción de raíces.
Pero si el olor es desagradable también lo es, que nos estemos dando una ducha y el agua que pueda fluir correctamente hacia la salida y vuelva por donde entró, dejándonos un agua sucia y con bacterias de la tubería.
La materia inorgánica puede acumularse en tuberías de lavabos, bidés y sobre todo en los desagües de las duchas, siendo necesario su desatasco y eliminación mediante productos químicos o remedios caseros.
Si usted opta por un producto químico asegúrese siempre de comprobar que sus tuberías son de PVC o plástico nunca de plomo, siga las instrucciones del fabricante y use guantes de goma para la manipulación del producto.